27 jun 2016

La Calle de las Casas Lindas de Berlín...


Por la Calle de las Casas Lindas la brisa normalmente oxigena.
El perfume de sus tilos entra, se absorbe, un poco sale... 

Conscientemente inhalo y exhalo. 

Al principio se siente como una especie de suspiro interno.. tranquilo.  
Empiezo a notar los latidos de mi corazón aletargándose..  y recién ahí comienzo a observar la gente a mi alrededor.  
No soy solo yo.. Todo el mundo comienza a sonreír, a abrir un poco los ojos, a respirar sintiéndolo… 
Una racha de aire parece bailar alrededor y también entre medio de los frondosos tilos.
El aire se perfuma aún más, se entilece más, sosiega más ..  
Ya viento comienza a hacer bailar las tupidas ramas y se ve, sí, se ve como un fantasma perfumador girando y girando como horizontal remolino… No se puede mas que entrecerrar pesadamente los ojos...

El remolino se hace entonces mas intenso, penetrante y algo extraño pasa… ¿a todos…?

Un pestañeo abochornado y mis pies se vuelven leves.. ¿leves?  
Ya no sienten las pequeñísimas asimetrías de esta vereda de Berlín.. ¿cómo?


Mis brazos empiezan a separarse de mi cuerpo, como con vida propia. Empiezan a balancearse hacia delante, hacia atrás.  No es que nunca lo hagan, es que ahora no se los estoy pidiendo. Ellos decidieron moverse solitos.  

¿Será este viento?

Son todos movimientos parsimoniosos… Trato de indicarle a mi cabeza que se incline. Vamos, ¡mirá el suelo caramba!
Bajo entonces la mirada y hay una distancia.. una pequeña distancia a la vereda… ¿Cómo? 

Pero mi cuerpo no se preocupa, parece feliz.  La sonrisa que ya tenía dibujada me lo dice.. esta sensación vaporosa… y mis pies tienen el control de una nueva danza. 

Bailan tan lindo...

¿Y a mi alrededor…? 

¡Todos son etéreos! 

El remolino de tilo alcanza a todo el que camina por la Calle de las Casas Lindas

Aquel gordito se siente liviano, sutil.. esa abuela con andador olvida su artritis y lo usa de volante de un formula uno en cámara lenta… A un vecino se le desparraman sus bio-frutillas por el aire como si no hubiera gravedad… Un skater cumple su sueño: es Marty McFly sin tener que volver al futuro… Un señor de sandalias con medias y camisa hawaiana quiere  seguir caminando como si no pasara nada mientras intenta que sus sandalias no se le escapen… Una pareja de muchachos hace que anda en bicicleta en el aire, se abrazan y dan vueltas de carrusel para envidia de mas de un solitario… Un diminuto perrito gira como trompito de juguete.

Con la primera ráfaga un joven acicalado había recibido a su amada con un beso … Ellos ya estaban flotando y no se dan cuenta de nada.

Viento denso de tilo denso, como nubes desde arriba… 

Y todos danzando la danza de la Calle de las Casas Lindas

Lejano, ¿un trueno?  

Muevo la cabeza hacia su origen... Se siente menos celeste, mas mundano.

Comienzo el descenso justo cuando veo corporizarse al dragón-tranvía. 

Todos nos posamos como hadas somnolientas… La ráfaga letárgica cesa su mágico suspiro.

Y sigo ahora simplemente caminando. 
Caminando sobre la vereda de la Calle de las Casas Lindas.

No tengo ninguna duda. En serio, ninguna.

Vuelvo.




Y si te gustó... --> Ella camina apresurada... ...


La Calle de las Casas Lindas es en realidad Schönhauser Allee, que se traduce como el 'boulevard de las casas lindas'... una calle llena de tilos de mi barrio, Prenzlauer Berg, en Berlín.




...como nubes desde arriba...



2 comentarios:

  1. Wowww que dulces y frescas líneas que nos transportan a esas Casas bonitas Gabriela. 😀

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